Los 3 Estilos de liderazgo según Kurt Lewin
Video explicativo: Kurt Lewin el famoso experimento sobre los estilos de liderazgo que incluía a Hitler
En 1939, un grupo de científicos estadounidenses dirigidos por el psicólogo Kurt Lewin, considerado hoy el padre de la psicología social, decidió realizar un experimento psicosocial para explicar cómo el comportamiento individual está condicionado según el estilo de liderazgo que se elija.
Este experimento surgió en un marco social en el cual las investigaciones se centran en explicar el comportamiento que tuvieron los nazis bajo el mando de Adolf Hitler
Para examinar el efecto de los diferentes estilos de liderazgo en el comportamiento, se formaron tres grupos de niños de entre 8 y 10 años que se reunieron después del colegio para realizar trabajos de manualidades
A cada grupo se le asignó un maestro que fue adoctrinado de antemano con un estilo de liderazgo particular:
- Líder Autocrático: siempre ordenaba estrictamente lo que había que hacer y no dejaba a los niños espacio para la discusión o la iniciativa.
- Líder Liberal: daba total libertad al grupo permitiendo que los niños desarrollaran actividades según sus propias ideas
- Líder Democrático: permitía que los niños debatiesen las tareas que se iban a desempeñar y ayudaba al grupo a tomar decisiones, teniendo en cuenta todas las opiniones y dando a los niños la oportunidad de tomar su propia iniciativa.
Resultados del experimento
Al cabo de unas semanas, los supervisores se turnaron para que cada grupo de niños pudiera experimentar los tres tipos de liderazgo.
Los resultados del experimento mostraron diferencias considerables entre los tres tipos de liderazgo. En el estilo autocrático aunque los niños sobrepasaron con creces sus objetivos de trabajo, sólo trabajaban cuando el instructor estaba delante de ellos, y cuando éste abandonaba el aula, se comportaban de forma agresiva con sus compañeros. Los niños mostraron un comportamiento agresivo y excesivamente competitivo, llegando a descalificar el trabajo de sus compañeros para realzar el suyo propio.
Por el contrario, en el estilo liberal los alumnos no alcanzaron nunca los objetivos fijados y a pesar de que el supervisor estuviese siempre presente en la clase, mostraban una pasividad total desarrollando un comportamiento plenamente anárquico e imposible de dominar.
Y por último, en el estilo democrático al igual que en el autocrático se lograron los objetivos marcados pero las diferencias fueron destacables respecto al comportamiento de los niños.
Estos adquirieron los valores de compañerismo y cooperación, e incluso cuando el profesor abandonaba el aula, continuaban trabajando disciplinadamente.
Así, de los tres estilos de liderazgo, el democrático resultó ser el más apropiado tanto para el desarrollo de las tareas como para el comportamiento de los niños.
De esta forma, Kurt Lewin demostró que el estilo democrático desarrolla aspectos muy positivos del comportamiento humano que hacen a los individuos más productivos y sociables, y también evidenció que bajo un estilo autocrático, los individuos se convierten en una amenaza para sus compañeros y para ellos mismos. Mientras que en un estilo más liberal, los sujetos no pueden establecer sus propias guías de trabajo, lo que demuestra que algunas pautas normativas son necesarias para el comportamiento del grupo.